Pues aquí me tienen, luego de varias semanas de ausencia.
Sigo viva!! Lo cual no es poca cosa. No, no he sufrido ningún accidente. Pero sobrevivir al día a día, y seguir manteniendo las ganas… wow.
Hoy les voy a dejar algunas reflexiones sobre un tema que de vez en cuando surge, en consultas, en talleres, hasta en charlas con amigas.
Cuando nos sentimos desafiados por nuestros hijos. Qué se nos mueve? Por qué nos mueve tanto? Qué nos preocupa?
Mi hijo me desafía
No quiero plantear ninguna situación de ejemplo. Cada quien rellenará con su imaginación y su propio concepto de desafío.
En el modelo de crianza más tradicional, autoritaria, si esta situación surge… es el momento de aplicar la mano dura.
Porque si no, no lo controlás más.
El niño tiene que saber quién manda.
Si yo le hubiera hablado así a mis padres…
Con lo cual, si estamos intentando una crianza más respetuosa de nuestros hijos, de sus emociones, de sus ritmos… y también de nosotros mismos, es muy probable que nos sintamos desorientados. Y encima, sin apoyo para intentar decidir qué hacer.
Porque si, es muy probable que haya que hacer algo.
La ventana de los dos años
Entre el primer y el tercer año de vida, nuestros hijos forjan su carácter. Éste ya comenzó a delinearse antes, claro está. Pero la autonomía marcada con la adquisición de la marcha, hace que estos años tengan una particular intensidad e importancia.
Si en el primer año logramos, cada quien con sus matices, atender todas las necesidades básicas de nuestro bebé, tendremos ahora un niño -toddler, como dicen los angloparlantes, me encanta esa palabrita- que se sentirá seguro para largarse a explorar el mundo, para hacer valer sus intereses y deseos. Y también, para comenzar a expresar sus emociones, aunque al principio les cueste o hasta los asuste.
Por lo tanto, se abre ante nosotros, como padres, una ventana de oportunidad. Ahora es cuando.
Si de verdad nos vamos a jugar por una crianza respetuosa, tenemos que ser concientes que se vienen tiempos tormentosos.
Y con esto no estoy diciendo que nuestros pequeños sean demonios en potencia ni nada parecido.
Esa es la idea que nos quieren vender; el pequeño troglodita que es necesario domar, contener, controlar. Nada de eso.
Lo que será necesario, es viajar hacia nuestro interior. Indefectiblemente, nuestro hijo nos va a enfrentar con nuestra propia ira, nuestras zonas más negadas, menos aceptadas, de nuestro carácter.
Ante cada situación de conflicto, deberemos optar. Reprimimos aquello que nos molesta en nuestro hijo (y por lo tanto, también en nosotros)? Lo dejamos pasar como si nada? O lo aceptamos, lo nombramos, y vemos quién le pone el cascabel al gato?
Estas opciones marcarán, sin duda, buena parte del desarrollo emocional de nuestro hijo.
Los niños necesitan límites
Esta es una frase que me dicen mucho cuando planteo ideas como las de las líneas anteriores.
Sí, claro, los niños necesitan límites. Todos los necesitamos. Necesitamos saber qué pautas regulan cada situación.
Pero los límites no implican autoritarismo.
Volviendo al título, si cuando nuestro hijo nos desafía, le caemos con todo el peso de nuestro poder adulto, para dominar la situación…
Lo que le estamos enseñando es que debe doblegarse ante la autoridad.
Que sus ideas, sus emociones, sus intereses, no importan tanto como los de los demás.
Y también, le estamos enseñando que ante un conflicto de intereses, el recurso válido es hacerse con el poder.
Así que, si tu hijo te desafía, te felicito
Porque significa que todavía no se ha quebrado.
Porque implica que espera de vos -su figura de apego más importante- que le ayudes a encontrar el camino. Juntos.
Porque te está dando la oportunidad de crecer junto a él.
Y porque te está regalando una entrada al túnel que lleva a tus propias heridas. Todas esas veces que te reprimieron, y barriste el dolor bajo la alfombra para sobrevivir.
Nuestros hijos nos desafían todo el tiempo, sí… a dejar de mirar para otro lado.
Me encantó Mariel! Sobre todo la aclaración de que los límites no implican autoritarismo… Qué pena que no todo el mundo lo entienda! Igual confieso que es algo que muchas veces salta de mi «programación» (educación-crianza). Bs
Muchas gracias por pasar y comentar, Magela!! A mí me pasa todos los días, lo de la programación, jeje.
Muy lindo artículo!! cada niño en su etapa pide lo que necesita, lo que me parece es que muchas veces en vez de entender desde su lugar y ayudarlo como decís «a ponerle nombre a las cosas » creemos que «nos están haciendo «esto o aquello a propósito para hacer su voluntad. Y cuando algo de nuestros hijos nos molesta, debemos abrir bien nuestros ojos y observarnos porque seguro hay algún tema nuestro sin resolver por ahí.
Exacto Vero!! Qué lindo acompañarnos así 🙂
Uuuy Mariel!!! en que día justo me llega este post! y que bien me viene para aquietar mi conciencia… Justo hoy me tocó escuchar un ….»hay que irle diciendo de a poco que cosas si y que cosas no!! porque si no no lo controlás más!! se te va complicar!!!» al que me quedé callada para no aumentar tensiones al mal momento del bebé. llegar a la noche y leer esto… ayuda a respirar profundo y seguir adelante… confiando en criar con respeto y mucho amorl. gracias!
Genial Tati!! Cuánto me alegro del buen timing 😉
Mil gracias por este artículo, ha hecho reflexionar en la forma que me criaron, a mi si me quebraron y lamentablemente eso me ha afectado muchísimo en mi vida adulta. Me lo echo a la bolsa para tenerlo presente con mi hijo para crecer los dos.
Gracias Jasmin por pasar y compartir tu experiencia, creo que todos, algunos más otros menos, arrastramos ese tipo de consecuencias en nuestros cuerpos. Ojalá todo esto sirva para que podamos reflexionar y encontrar juntos un camino mejor.
La teoría, creo que todos los que pretendemos una crianza respetuosa la tenemos…ahora, en el día a día, a veces se me hace muy cuesta arriba sacar a mi hijo de un año y cinco meses del enchufe. .o del armario de los productos de limpieza…o del mueble donde está la vajilla sin «imponerme».
Si bien, por ejemplo, que no coma me enloquece..me es más fácil respetar en esas situaciones su voluntad y no obligarlo a que coma cuando YO digo, que en ocasiones en las que claramente se está poniendo en peligro como las descriptas antes. A veces me parece que es no «porque no»….o cómo se le explica el peligro de la electricidad a esta edad? !? O sea…siempre primero intento persuadirlo con un juguete..o algo que le guste para que deje de hacer «lo que está mal» pero cuando su insistencia es inquebrantable no puedo dejarlo en el enchufe o con la lavandina en la mano..
Uff me extendi demasiado quizá…creo que el post también me llegó justo ja! yo sí quise poner situaciones puntuales que a veces me «desbordan»…cómo se educa respetuosamente en esos casos?
Hola Valeria!! Muchas gracias por pasar y por compartir tus inquietudes, que son las de casi todas las mamis 😉
En este artículo en particular hice foco en lo que nos pasa a los adultos… pero a la hora de criar también es importante tener presentes las etapas del desarrollo de nuestros hijos.
Tu niño es muy peque aún para comprender el «No». En ese tipo de situaciones como las que mencionás, lo más útil a esta edad, es no dejarle al alcance nada peligroso. Escribí algo al respecto, luego de que otra mamá me hiciera una consulta muy similar, fijate si te orienta http://crianzayenergia.com/mi-bebe-no-me-hace-caso/
Un abrazo y estoy aquí cuando quieras!
Mariel, mil gracias por siempre brindarnos apoyo a las mamas ya que siempre necesitamos donde recargar nuestras baterias para estar 100% disponibles para TODO.
Me encanto el articulo, y como a las otras mamas tb me llego JUSTO en el momento indicado, mi pequeño de 3 años me esta imponiendo su caracter y siento que ante la situacion,que por fuera me vuelvo autoritaria pero por dentro….. ME DESARMA, afloran todos los miedos y hay veces en que es dificil ser el adulto en ese momento.
Entendi la frase ´te felicito´…………, NUESTROS HIJOS nos ayudan a Sanar. Son mas sabios que nosotros.
Bienvenida y un saludo lleno de buena energia, este invierno vino muy raro y mi peque tb se enfermó asi que en cierto modo vivimos algo parecido.
Muchas gracias por todo Leticia!! Por la bienvenida, por comentar, por compartir… estamos en contacto!!
Bueno me hiciste llorar… si.. ta brava esta etapa. Llenarme de paciencia es lo me me toca en cada situación de estas (agarra cuchillos, no se quiere sacar pañal, etc etc). Que desafío! un abrazo y gracias bella. Me alegro que estén mejor!
Clau! Yo lo terminé de escribir lagrimeando también. Hermoso y removedor esto de la maternidad!
Me encanto Mariel, fue casi como un abrazoooooo a la distancia!!! A veces se hace taaaan difícil… Difícil no agotarse (sobre todo si tomamos en cuenta el ritmo de nuestras vidas), difícil saber si lo estamos haciendo bien, difícil no sentirse intimidado frente a la «mirada de los otros».
De todas maneras, sigo pensando que vale la pena intentarlo, que cada situación es un desafío, que cuando nos equivocamos (lo hago muchas veces al día y seguro se me pasa por alto alguna) siempreee podemos pedir disculpas, mostrar nuestro arrepentimiento y en ese gesto también estaremos transmitiendo amor a nuestros hijos, ellos siempreeee siempre estan dispuestos a darnos un abrazo… su amor es infinito y es el mejor motor que uno puede tener en la vida!
Muchas gracias por tus palabras… hoy las estaba necesitando!!!!!
Me alegro mucho que te haya servido Nati!! Es tal cual todo lo que decís!
Que bueno un poco de paz para mi!!! Porque es duro escuchar permanentementeel… tu hija es asi porque vos la haces asi, malcriada!!1
y tanto lo escuchas que al final te sentis tan culpable…. 🙁
gracias x el articulo!!!
Gracias a vos por pasar y comentar!!
Me llega en buen momento la información y la agradezco. ! Mi hijo tiene 3 años y no se ha quebrado. A solas pensaba que haré, será correcto, etc, etc. Y me has ayudado a dejarme en claro muchas cosas. Que gusto!! Saludos
Me alegro muchísimo Isela!! Un abrazo
Lo comparto en mi página de Facebook, tengo una tienda de juguetes de madera, cuentos y material de porteo..además hacemos grupos de crianza, así que me encanta encontrar estas joyitas.Felicidades!!
Gracias a vos Marta por compartir!!