ser suficientemente mamá

Ser suficientemente mamá?

ser suficientemente mamá

El domingo pasado fue el día de la Madre en Uruguay y en bastantes países. Así que hoy voy a reflexionar un poco sobre qué significa ser mamá para mí, en la sociedad en que vivimos. Pasen, lean y comenten!

La maternidad en nuestra sociedad

Todos, sin excepción, nacimos de una madre. No hay vuelta que darle a eso, al menos por ahora. Sin embargo, la maternidad parece ser siempre un trabajo de segunda, al menos hasta que se acerca el día de la madre.

La sociedad en que vivimos, no está hecha para maternar. Nadie espera que lleves a tu bebé a una reunión de trabajo, los cumpleaños de los amigos se hacen en horarios imposibles para quienes tenemos niños pequeños… y la lista sigue y sigue.

Muchas veces, esto hace que nos sintamos perdidas, aisladas. Llegamos incluso a deprimirnos por la pérdida de nuestro antiguo yo.

Y a veces, todos esos sentimientos pueden hacer que nos replanteemos la forma en que estamos criando a nuestro bebé. Es que dedicarnos a él al 100%, respetando sus necesidades, está muy poco valorado en nuestro ambiente…

 Para qué criamos con apego?

No estoy diciendo que necesitemos que nos den medallas de algún tipo por ser súper mamás.

De hecho, no creo que seamos «súper» nada.

Pero sí que estaría bueno, por una vez, que se respetara la forma de maternar que cada una elija.

En el mundillo blogomaternal, muchas veces se arman guerras sobre ser mejores madres (o peores, según quién lo diga) por dar teta a término, colechar, etc., etc.

Más allá de que la práctica de determinadas cosas no garantiza nada, creo que es obvio que no hacemos todo eso para ser mejores en nada.

Hay tantas formas de ser mamá como mamás en el mundo. Seguramente, casi todas ellas hacen lo mejor que pueden. Pero la «lucha» por ser mejores no es para compararse con otras mamás; intentamos hacer lo mejor para nuestros hijos. Y también para nosotras, por supuesto.

Yo doy teta, colecho, porteo, y respeto lo más que puedo a mi hijo, porque es lo que me sale de las tripas. No podría criar de otra manera. Eso no quiere decir que no afronte conflictos; mi sombra está ahí para hacerme crecer.

También hago todo eso, porque siento que es la única forma en que apuesto a la prevención en la crianza de mi hijo.

Seguramente cometeré errores, algunos podré repararlos, de otros deberá hacerse cargo él cuando sea más grande.

Pero aquellas cosas que sí sé que puedo prevenir, intentaré hacerlo. Creo con todo mi corazón, que él se lo merece.

 

2 Comments

  1. Muy buenas reflexiones, gracias!

    1. Gracias a vos por pasar y comentar!

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