grupos de crianza

Grupos de crianza: sectas totalitarias?

grupos de crianza

Si siguen el blog desde hace un tiempo, sabrán ya que tengo el placer de coordinar grupos de crianza.

Es una experiencia que recomiendo, ya que se encuentra una compañía afectuosa que nos ayuda a crecer como padres.

Pero como cualquier espacio de intercambio humano, también allí podemos volcar nuestras sombras, y transformarlo en algo tan autoritario como la crianza que deseamos evitar.

Los grupos de crianza como refugio

Muchas veces, cuando comenzamos a asistir a un grupo de crianza, sentimos que es un refugio; un lugar en donde hablar de colecho, de porteo, de parto natural… no nos hace sentir extraterrestres.

Y en parte, este efecto es una de las características positivas que tienen los grupos de crianza.

Pero, puede confundirnos en el sentido de hacernos pensar que todos los que estamos ahí, estamos de acuerdo en absolutamente todo. O también, puede hacernos creer que todos los que estamos ahí, no cometemos errores.

En nuestra necesidad imperiosa de encontrar una tribu que nos ampare, nos olvidamos de reconocer nuestra individualidad y la de los demás.

Algunas veces he observado también, que en el reconocimiento mutuo, en el compartir «idiomas» de crianza similares, se cimentan formas de sentir nuestra ma/paternidad, en detrimento de la de los demás.

Entonces, por ejemplo, todos los que vamos al grupo de crianza somos unos genios, y miramos con condescendencia a aquellos que no lo hacen.

O nos embanderamos, criticando duramente a la mamá que no amamanta, al papá que no portea o a la familia que manda a su bebé a la guardería. Sin poder hacer uso de la empatía, sin parar a observar sin juzgar, la vida de cada una de esas personas.

Esta postura no es respetuosa, y estaremos actuando una contradicción entre lo que pretendemos transmitirle a nuestros hijos, y la forma en que actuamos.

Pero además, nos expone a «desilusionarnos», a volver a sentirnos solos o aislados… en la primera diferencia que surja con algún miembro del grupo.

Si eso nos pasa, en realidad se debe a nuestra sombra, que nos hizo poner expectativas falsas en el grupo. Y si somos capaces de observarnos hacia adentro, y ver por qué nos mueve tanto ese desacuerdo, si tan seguros estábamos de nuestra forma de criar… seguramente podremos movernos de ese lugar hacia otro más flexible, empático, adulto.

Los grupos de crianza como espacio de información

Como psicóloga y coordinadora, reconozco q a veces es tentador caer en «dar cátedra». Y como mamá también, claro; si yo encontré algo que me funcionó, por qué no compartirlo?

El problema no está en compartir información, por supuesto. Este también es uno de los objetivos que se cumple en un Grupo de Crianza.

Pero compartir información no implica dar órdenes. Ni opinar sobre la forma de vida del otro.

Compartir información es eso, justamente; llevar al espacio que todos construimos, cosas que nos ayuden a reflexionar, a actuar diferente si lo sentimos necesario, a crecer.

En definitiva, a tomar las mejores decisiones para nuestra familia.Porque sin información, no «decidimos» realmente. Sólo actuamos automáticamente, de la forma que conozcamos.

Ahí sí está la riqueza, para mí, de la crianza «en tribu»; YO tomo las decisiones, porque SÓLO YO sé lo que es mejor para mí. La tribu me acompaña, me sostiene, me respeta, me reconoce en mi intento por hacer lo mejor que pueda.

Y así, sabremos que estamos en un «buen» grupo de crianza: un espacio seguro… hasta para equivocarnos.


Todo tiene su límite

Por supuesto, hay límites. Cada uno tendrá que ver los suyos; yo aquí voy a plantear los míos.

  • No voy a aceptar ni tolerar argumentos a favor de la crianza en base a castigos físicos o abusos de ningún tipo.
  • Tampoco aquellos que plantean «dejar llorar» para que el niño aprenda.

Y esto tiene una base muy sencilla. Está suficientemente investigado y comprobado, que el llanto desatendido y la violencia física provocan efectos biológicos y psicológicos muy difíciles de revertir. Colocan al niño en un lugar de víctima.

Callarme ese saber sería casi una omisión de asistencia, como psicóloga. Y como madre, es algo que me revuelve las entrañas. Sencillamente no puedo.

Por supuesto, nuevamente reconozco que los papás que sí usan estos métodos, seguramente piensen que están haciendo lo que deben hacer. Y desde mi lugar, intentaré acercarles toda la información y apoyo que pueda para que modifiquen su accionar.

 

Qué te pareció el artículo? Coincidís o discrepás con algún punto (o con todos, jeje). Dejame un comentario! En la discusión crecemos todos!

6 Comments

  1. Mariel es impresionante la capacidad de reflexion y autocritica que tenes y lo positiva que sos para nuestra sociedad! Gracias por ocuparte y entregarte en este camino de amor, de crianza y de verdad…y sobre todo por tu solidaridad ante el projimo! Sigo fielmente tu blog, y comparto toda la info que posteas para intentar difundir esto lo mas posible…una sociedad amorosa es posible…es cuestion de volver a las bases y ser fiel a nuestro corazon e instintos! GRACIAS,!!!!!

    1. Guau Flor, me voy a poner colorada 🙂
      Muchas gracias! Creo q somos cada vez mas los q creemos q otro mundo es posible. Abrazos

  2. Mariel, me parece super importante el punto y mas aùn como lo planteas, es muy comun ver desde las minorìas que tenemos otro punto de vista cierto sectarismo y soberbia para con el distinto, eso lejos de sumar que deberìa ser el objetivo resta. Te agradezco infinitamente estas reflexiones ya que aportan mucho valor.

    1. Gracias Florencia por pasar y comentar!

  3. Pfff Mariel…estoy luchando con mi sombra para no caer en todo esto que mencionas, no porque me crea super madre o superior, pero mas de una vez me he encontrado criticando a otras madres o mas bien a otras formas de criar y maternar (o no). Y a decir verdad no es algo que me guste porque se que esta mal, porque suelo ser empatica y con este tema no lo logro. Creo que viene por el lado de que la sociedad misma es asi de critica y juzgadora, no se. Voy a seguir trabajando sobre esto, desde ya el articulogenialgenia, me re sirvio 🙂 Gracias.

    1. Gracias Natu por pasar y comentar.
      Lo importante es q te das cuenta y sos conciente q es algo a cambiar. Todas luchamos con nuestra sombra. A veces esta bueno amigarse un poco con ella, xq nos trae mucha info sobre por qué reaccionamos como lo hacemos 😉

Leave a Comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *